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La ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, y la ministra de Sanidad, Carolina Darias, han anunciado este lunes que la inversión pública en el PERTE para la Salud de Vanguardia pasará de los 982 millones planeados inicialmente a los 1.500 millones.
Así lo han avanzado las ministras en declaraciones a los medios antes de la segunda reunión de la Alianza por el PERTE de Salud de Vanguardia, que se ha celebrado este lunes en la sede del Ministerio de Ciencia e Innovación con la participación de administraciones públicas, comunidades autónomas, sociedades científicas, asociaciones empresariales y de pacientes.
El PERTE para la Salud de Vanguardia, presentado en noviembre de 2021 por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, preveía una inversión de 1.469 millones de euros en el periodo 2021-2023, con una contribución del sector público de 982 millones de euros y una inversión privada de 487 millones de euros.
«El Gobierno ha situado la salud como un pilar fundamental para la recuperación y transformación. El objetivo del PERTE es hacer que nuestro país sea líder tanto en producción en investigación de terapias avanzadas como en la producción de las mismas, así como en la administración en el Sistema Nacional de Salud (SNS)», ha comentado la ministra Morant.
«Hoy es un día importante para hacer un seguimiento del PERTE, que es una apuesta estratégica de país. Va a contribuir a seguir avanzando en la colaboración público-privada. Una de las lecciones de la pandemia es la importancia de la interacción entre lo público y el tejido industrial e innovador», ha añadido Darias.
Así, el Gobierno «va a sumar nuevos esfuerzos» a este PERTE. «Vamos a pasar de 982 millones de euros a más de 1.500 de inversión pública. Lo hemos podido hacer sumando las iniciativas de distintos ministerios, igual que en el primer diseño del PERTE, y también por los Presupuestos Generales del Estado para 2023″, ha justificado Morant.
En esta ampliación del PERTE entran, por ejemplo, los 230 millones del Ministerio de Sanidad para la «transformación digital» de la Atención Primaria. «Todos sabemos de su importancia como eje vertebrador del Sistema Nacional de Salud», ha resaltado la ministra.
Darias considera que el Plan de Acción en Atención Primaria y el de Salud Digital van a ser útiles para «incorporar las tecnologías digitales a la prestación de la atención sanitaria», así como para, por ejemplo, «hacer un seguimiento a pacientes con complejidad que requieran una monitorización constante desde la consulta».
El PERTE incorpora ahora los 100 millones de euros que ha asignado el Gobierno en los Presupuestos Generales del Estado para medicina personalizada de precisión y los 70 millones para «dar respuesta a los desafíos de las enfermedades raras, con especial atención a la ELA».
También se van a destinar 32 millones del Ministerio de Educación para la capacitación y formación de personal del sector de salud en materias propias del PERTE, como terapias avanzadas o medicina de precisión.
Igualmente, se incluye una convocatoria para expresiones de intereses empresariales por valor de 200 millones de euros que «se va a resolver de aquí a poco«. «Por tanto, también fortalecemos la relación de las empresas para su capacitación intelectual y que sea en nuestro país donde se produzcan estas terapias avanzadas», ha indicado Morant.
Otro proyecto es la próxima convocatoria para la creación de un consorcio de terapias avanzadas y otra del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) ya publicada para la dotación de equipos en los centros de investigación.
Por último, Morant ha destacado el «alto cumplimiento» hasta el momento del PERTE. «En abril estábamos en el 26 por ciento y ahora estamos en el 52. Estamos cumpliendo el calendario. El PERTE va según el compromiso y los tiemops que estaban calculados», ha asegurado.
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