Denuncian en un comunicado la «intrusión implacable» en la autonomía pedagógica del profesorado, el menosprecio por los contenidos recogidos en la nueva ley, la permanente y «maniquea» oposición entre la enseñanza tradicional y la nueva pedagogía, la desaparición de cualquier responsabilidad del alumno en el proceso de aprendizaje y la apuesta por un sistema de evaluación «laberíntico».
En este sentido, los docentes de dicho instituto creen que los estudiantes y sus familias no entenderán bien cómo se les evalúa, con el «peligro» y la «arbitrariedad» que puede implicar. La misma asamblea decidió apoyar el manifiesto impulsado por el claustro del IES Madina Mayurqa, el cual denuncia el «esnobismo pedagógico» de unos expertos que han diseñado la ley «sin conocer la realidad de las aulas». «No es más que un edificio teórico, artificiosos, vacío de contenido y criterio que, a la larga, sufrirán los alumnos», insisten.
La asamblea del IES Ramon Llull nació el pasado 26 de octubre, cuando el claustro del centro aprobó por unanimidad mostrar su rechazo contra los criterios de evaluación de la LOMLOE y dejando claro que cumplen con la normativa por «imperativo legal».