Alpine: la purga en la escudería de Fernando Alonso y la furia de Alain Prost

Fernando Alonso lleva tiempo tratando de atraer a través de un mensaje encriptado toda la atención mediática que tras su regreso a la Fórmula 1 no le ha terminado de generar los resultados pretenidos. “El plan”. El asturiano se refiere a él como quien anticipa la maniobra trascendental que provocará un punto de inflexión en su trayectoria, que le devolverá al estrellato. En su caso, eso significaría estar en condiciones de pelear por el título, algo que no logra desde hace una década (2012), cuando corría enfundado en el mono de Ferrari. Terminó el Mundial de 2021 y nadie sabe muy bien todavía qué es el plan. Sin embargo, ese sustantivo podría perfectamente definir la sacudida interna que en los últimos diez días ha supuesto la salida de Alpine de dos elementos fundamentales del equipo en los últimos años.

La semana pasada, la escudería que opera bajo el paraguas de Renault, anunció la marcha de Marcin Budkowski, el que hasta ese momento ocupaba el cargo de director ejecutivo. Este lunes por la mañana, Autosport adelantaba el cese de Alain Prost, tetracampeón del mundo (1985, 1986, 1989 y 1993) y que había estado vinculado a la marca del rombo de alguna u otra forma desde que debutó en la Fórmula Renault, allá por 1975. En 2019 firmó como director no ejecutivo de la división de carreras del grupo. A las pocas horas era el propio Profesor quien daba por buenas esas informaciones, y no solo eso, sino que criticaba cómo le había llegado la noticia de su marcha.

Prost: “Me han faltado al respeto”

“Estoy muy decepcionado por la forma en que se han comunicado las noticias. Habíamos acordado que lo haríamos el equipo y yo, conjuntamente. ¡Me han faltado al respeto!”, lamentó Prost en sus perfiles de redes sociales. ¨En Abu Dhabi –la última prueba del pasado campeonato– rechacé la oferta que me hicieron, por cuestiones personales¨, quiso dejar claro el ex piloto.

Alpine pasa por un proceso de reestructuración que confirma lo evidente: por más optimismo y buenas caras que se pusieran, las cosas no fueron en 2021 como se esperaba, sobre todo tras la apuesta que supuso el regreso de Alonso. La formación terminó en la quinta plaza de la estadística reservada a los equipos, la misma posición que ocupó el ejercicio anterior, pero con 26 puntos menos. El triunfo conseguido por Esteban Ocon en aquel disparatado Gran Premio de Hungría, y el tercer puesto del español en Qatar –los dos únicos podios–, lógicamente alegraron a la tropa de Enstone (Gran Bretaña), pero no cambiaron el signo de un curso decepcionante. El ovetense finalizó el décimo, con 81 puntos en su casillero, siete más que su vecino de taller, que lo hizo el undécimo.

A menos de un mes y medio para que arranquen en Montmeló los primeros entrenamiento de pretemporada (del 23 al 25 de febrero), más decisivos que nunca ante la avalancha de cambios que se aplicarán en el reglamento técnico de 2022, las salidas de Budkowski y Prost no son una buena señal. “Lo que está claro es que así no podemos seguir”, declara a EL PAÍS una fuente interna de Alpine.

El hueco de Prost no parece que vaya a ser ocupado por nadie, mientras que Otmar Szafnauer tiene todos los números para ocupar la silla de Budkowski, tras haber roto con Aston Martin. A su vez, tampoco está asegurada la continuidad de Davide Brivio, el director de carreras, que aterrizó hace un año tras ser una pieza clave para que Suzuki recuperara la corona en MotoGP, de la mano de Joan Mir, 20 dos décadas después de la última vez, con Kenny Roberts Júnior.

Cuando anunció que volvía a la F1 tras dos años experimentando en otras disciplinas, Alonso dejó claro que el objetivo era rodarse en 2021 para atacar con todo el 2022, cuando habrá cumplido ya los 41 años. La revolución en la normativa, combinada con la reducción del límite presupuestario, que pasará a ser de 125 millones de euros por equipo, debería abrir la posibilidad para que otros se entrometieran en el duelo entre Mercedes y Red Bull. No obstante, tanto movimiento a tan poco tiempo para que los coches echen a rodar no es el mejor de los presagios para Alpine.