Así es el complicado sistema de votación italiano

No solo el sistema electoral italiano y el español son diversos, el primero es proporcional y uninominal y el segundo completamente proporcional, también la forma de votar en los comicios es bastante diversa. En España se vota eligiendo a través de las papeletas de los partidos que, una vez individualizada la que queremos elegir, se introduce en un sobre que garantiza el voto secreto y se introduce en una urna tras identificarnos correspondientemente. En cambio, en Italia, se utiliza una gran papeleta única donde todos los candidatos, partidos y coaliciones están incluidos y que puede llegar a ocupar como un folio din A3, por poner un ejemplo aproximado podríamos decir de las mismas dimensiones de un periódico impreso, y donde el tamaño depende de los candidatos que ese año se presenten. Así, cuantos más partidos haya, más ocupará el folio electoral. 

En Italia, al entrar al colegio donde corresponde ejercer el derecho al voto la norma prevé «confiscar» los dispositivos telefónicos para evitar que una posible foto al voto pueda ser “vendida” para demostrar el apoyo a un candidato a cambio de algún tipo de favor o recompensa. Se prohíbe también entrar con menores. Una vez que los votantes están ya en las cabinas tienen ante ellos dos de estas grandes papeletas, una amarilla para el Senado y una rosa para la Cámara de Diputados. Se debe presentar o tener en orden, como en España, la tarjeta del censo electoral y un documento de identidad y, cuando se decide definitivamente a votar el por el cual se procede a “marca la X” es fundamental para no anular el propio voto por equivocación.

La papeleta está organizada en varios cuadros donde el símbolo del partido identifica la opción a votar acompañada, evidentemente, del nombre del candidato principal en grande y también de la lista de otras personas que completan la candidatura. Esto funciona para los partidos que se presentan solos pero, en los casos en los que hay una coalición electoral que aúna varios partidos, como es el caso del centro derecha en el que confluyen Fuerza Italia de Silvio Berlusconi, la Liga de Salvini y Hermanos de Italia de Meloni aparecen de la misma forma y, además, agrupados en un cuadro que identifica la alianza. 

La manera en la que se mete la X es importante porque se puede caer en una incompatibilidad que anularía el voto dados los múltiples nombres y opciones que se encuentran en una misma papeleta. Lo primero que debe hacerse, explican las indicaciones gubernamentales sobre el voto, es identificar el candidato de la coalición o del partido, si se presenta en solitario, que se quiere votar. Ese nombre que aparece en grande en la parte superior de cada casilla de los diferentes partidos se lleva la primera X y, luego, si es el caso de una coalición se puede votar también al partido que más nos guste de la misma para que el voto se contabilice en esa opción. Si se vota solo al candidato pactado por los partidos que la componen, y no se pone la segunda X sobre uno de ellos, el voto viene repartido de forma proporcional a todos los que componen la unión electoral. En el caso de que el partido se presente de forma individual, basta la X sobre el nombre o sobre el propio logo del partido para votar. 

Si el votante italiano no se sale de estas indicaciones no tendría que tener ningún problema para hacer que su voto fuese válido. En cambio, sería, por ejemplo, “voto inconexo” si pusiese la X sobre un candidato y luego la segunda X sobre un partido de una coalición que no está vinculada con el mismo. Por ejemplo, que votase el candidato del M5S y luego uno de los partidos de la coalición de centro derecha, como por ejemplo Hermanos de Italia de Giorgia Meloni. Habría una incompatibilidad en el voto y sería, definitivamente, anulado. Cuando el proceso de decisión y la marca de la X termina el proprio (gran) folio tiene unos pliegues que facilitan su doblaje, que es bastante particular para evitar que se vea el voto de alguna forma, y se debe introducir finalmente en la urna.