Un «Leonardo de nuestro tiempo». Así describió Picasso a Bruno Munari (Milán, 1907-1998), una de las figuras más significativas del diseño y la comunicación visual del siglo XX, y sin embargo no lo suficientemente conocida. El pasado febrero, la Fundación Juan March inauguró en Madrid la muestra que ahora llega a Palma: la primera retrospectiva en España dedicada a este artista, diseñador y pedagogo que buscó la esencia del arte y el diseño en el equilibrio entre el rigor y la ligereza, utilizando siempre el juego, el humor y la ironía.

Concebida como «una muestra colectiva de Bruno Munari» (subtítulo que él mismo otorgó a una de sus muestras), la muestra ha sido comisariada por un equipo curatorial formado por el comisario invitado, Marco Meneguzzo, junto con Manuel Fontán del Junco y Aída Capa (Fundación Juan March). A través de una selección de más de 130 obras –entre pinturas, dibujos y esculturas, proyecciones y juegos de luz, piezas de diseño gráfico e industrial, ejercicios tipográficos y escritos y libros infantiles–la exposición pone de manifiesto la amplitud de medios utilizados por el artista en su investigación plástica y visual, siempre experimental e innovadora.

La muestra, indican desde el Museu Fundación Juan March, ha sido posible gracias a la «generosidad de colecciones privadas e instituciones públicas y privadas que han prestado las piezas de Munari durante este largo periodo» y destacan, entre ellos, a la Fondazione Jacqueline Vodoz e Bruno Danese de Milán, la Repetto Gallery de Londres, el Archivo Lafuente, el Museo de Arte Contemporáneo Helga de Alvear, la Galería Cadaqués, el Archivio Ugo Mulas y diversas colecciones particulares.

Al igual que la exposición de Madrid, la muestra y el catálogo, que abarcan desde las primeras obras de Munari –vinculadas al futurismo y al diseño gráfico– hasta sus últimos experimentos de los años 90, se organizan entorno a cinco conceptos metodológicos esenciales en su obra: tiempo, método, ligereza, experimentación y contemplación: Estar en el tiempo; De las dos a las cuatro dimensiones; El método como método; Superarel límite; Anular el tiempo; y, por último, Descubrir el mundo. En estos procesos subyace lo que él llamaba «método»: «el secreto -escribió- es que siempre parto de la técnica, no del arte […] Si se parte de la técnica, se sabe hasta dónde se puede llegar». La presente muestra incluye, además, un espacio creativo inspirado enla exposición, destinado a niños, jóvenes y familias, que complementa la habitual oferta educativa del Museu.