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MADRID, 20 Jul. (EUROPA PRESS) –

IU llevará a los ayuntamientos en los que tiene representación una moción para instar a todas las administraciones a blindar la condición pública de los servicios de prevención y extinción de incendios, con recursos «bien dimensionados» y garanticen una respuesta «rápida» a estas situaciones de emergencia.

Además, considera «imprescindible» aprobación del estatuto básico de bomberos forestales, pues debe ser la base para «estabilizar los empleos y acabar con la precariedad a través de fórmulas de estabilidad y continuidad laboral».

Mediante las áreas federales de Municipal y Ecología, que coordinan Rubén Pérez y Eva García Sempere respectivamente, IU impulsa una respuesta «práctica, precisa y realizable» a la «trágica situación» provocada por los incendios forestales en todo el territorio.

En un comunicado, la formación alerta de que los fuegos han calcinado cerca de 140.000 hectáreas en lo que va de año, siete veces más que la media anual en este periodo. A ello se suma que han fallecido dos personas, un bombero forestal y un ganadero en el mismo incendio en Losacio (Zamora).

Con esta moción, IU incide no solo en las graves consecuencias sociales, económicas y medioambientales que acarrean los más de 5.300 incendios de distinta índole contabilizados hasta el momento, sino también el fenómeno de los denominados Grandes Incendios Forestales (GIF), aquellos que afectan a más de 500 hectáreas y son de «alta intensidad, difícilmente controlables, destructivos e ingobernables».

De esta forma, diserta que en lo que va de año se han producido más de 15 grandes incendios forestales y en los últimos días seguían activos al menos seis de ellos, cuatro en Castilla y León y dos en Galicia.

PROPUESTAS

Entre las propuestas concretas que IU plantea con esta iniciativa figuran el diseño de los planes de restauración y recuperación de la superficie forestal, una ordenación forestal para hacer masas más abiertas, evitar los monocultivos de especies pirófitas y disminuir la carga de fuego y la continuidad incontrolada de las masas forestales.

A su vez, exige el cumplimiento de la legislación en materia de montes y ordenación territorial para solventar el mal estado de los cortafuegos o vías de acceso, y evitar la urbanización «descontrolada» de las zonas boscosas.

Por otro lado, demanda programas de sensibilización para evitar el uso del fuego en actividades agrícolas, desplegar políticas de recuperación del medio ambiente y alerta la incidencia directa del cambio climático en este problema, sumado a la «despoblación y el abandono» del medio rural.

Finalmente, alerta de la inexistencia de «verdaderos operativos de prevención», así como de los «recortes continuos» en las escasas políticas de prevención existentes, lo que lleva a que «en España somos buenos apagando incendios, pero falla la prevención. Tenemos excelentes profesionales, pero maltratados por las distintas administraciones».

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