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Entre el 21 al 23 de julio se celebrarán 4.500 bodas en España
En principio, si no eres el contrayente o familiar muy directo es complicado que te permitan librarte
En 2022 se llevaron a cabo unas 189.000 bodas, en 2023 se estima que la cifra podría ser similar
La sorpresa del adelanto electoral a julio está provocando cambios de planes, como vacaciones que se atrasan y votos por correo para poder votar si no se está en la ciudad. Pero hay quien no puede cambiar lo que tenía previsto con tanta facilidad.
El fin de semana de las elecciones generales miles de españoles estarán de boda. Según ha calculado el portal del sector Bodas.net, entre el 21 al 23 de julio se celebrarán 4.500 bodas en España, es decir casi el 3% del total celebradas en este año.
Teniendo en cuenta que de media en España asisten a una boda 117 personas, según datos de la nueva edición del Libro Imprescindible de las Bodas, más de medio millón de españoles estarán en una ceremonia nupcial durante esos días. Españoles que podrían ver truncados sus planes de fiesta si les toca estar en una de las 60.000 mesas electorales dispuestas.
El 23 de julio están llamados a las urnas 37.466.432 españoles y de estos, 181.761 personas tendrán que pasar todo el día en los colegios ya sea presidiendo o asistiendo como vocal. Además, los suplentes también tendrán que hacer acto de presencia en el colegio electoral a las ocho de la mañana. Serán 363.522 personas más.
¿Y qué pasa si tengo una boda?
En principio si no eres el contrayente o familiar muy directo es complicado que te permitan no formar parte de una mesa electoral . «Si cualquiera de los designados estuviera en imposibilidad de acudir al desempeño de su cargo, debe comunicarlo a la Junta de Zona, al menos setenta y dos horas antes del acto «, dice la Ley. Pero, ¿quién se puede librar?:
Solo podrán evitar la mesa electoral quienes justifiquen su ausencia previamente de acuerdo a uno de los motivos recogidos en la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (LOREG), que incluye causas personales, familiares y profesionales. Y las bodas entran si eres el que te casas o familiar directo.
Es decir se considera eximente «la concurrencia el día de la elección de eventos familiares relevantes inaplazables o en los que el aplazamiento provoque perjuicios económicos importantes. Se incluye en este supuesto a familiares hasta el segundo grado de consanguineidad, lo que incluye a padres, hijos, suegros, yernos, nueras, abuelos, hermanos, nietos y cuñados. No menciona a tíos, sobrinos, primos o amigos.
Si la boda es el día antes o después de las elecciones, no se considera excepción, por lo que las parejas e invitados a una boda el viernes 21 o sábado 22 de julio, aunque el enlace tenga previsto durar más de un día (hecho más que habitual en las bodas actuales), tendrán que tenerlo en cuenta, también si la celebración requiere desplazarse.
La Ley Electoral no recoge el supuesto de reserva de hoteles o billetes, pero la Junta Electoral Central (JEC) sí suele aceptarlo en caso de demostrar un posible perjuicio económico. Las excusas para no formar parte de la mesa se pueden tramitar a través de la app ‘Excusas’ o en persona ante la JEC.
¿Y la luna de miel?
Y en cuanto al día siguiente de la boda, si a uno de los miembros del nuevo matrimonio le ha tocado formar parte de una mesa electoral, sólo podrá irse de Luna de Miel si demuestra ante la Junta Electoral de la Zona que se trata de un viaje reservado y planificado con antelación, antes de haber sido convocadas las elecciones.
En cualquier caso, la decisión definitiva llegará del 8 al 13 de julio. En esos 5 días la Junta Electoral de Zona decide sobre las excusas que se han presentado. Por tanto, tendremos que esperar a 10 días antes de las elecciones para saber si tendremos que presentarnos o no el 23J en el colegio electoral.
Sin olvidar que formar parte de la mesa es obligatorio por ley y no hacerlo puede ocasionar pena de cárcel de entre tres meses y un año.
La tendencia de celebrar varios días de boda
Casarse está de moda. En 2022 se celebraron unas 189.000 bodas, casi un 63% más con respecto a 2020, un incremento lógico teniendo en cuenta la pandemia de covid-19. La Asociación de Profesionales de Bodas (APBE) estima que la cifra será muy similar este 2023.
Pero las ceremonias ahora no son solo cosa de un día. Al 51% de las parejas les gustaría hacer un evento que dure todo un fin de semana, según datos recogidos por Bodas.net.
De acuerdo con un informe de este portal, las parejas quieren pasar más tiempo con sus amigos y familiares (55%) o alargar la fiesta (30%) como motivos principales para querer una boda de este estilo. Las bodas actuales son largas. Se celebra la preboda, el brunch del día siguiente…
Un tipo de enlaces que se conocen con el nombre de ‘wedding chapters’ o ‘multi evento’, y aunque la celebración de la boda no tiene por qué hacerse en viernes o domingo, sí que se amplía a estos días para poder realizarla.
Lo que supone una boda
Casarse es caro y celebrarlo no es ningún regalo. Al contrario, pasar ese día con familiares y amigos festejando cuesta de media unos 20.500 euros. Así que muchas parejas están recurriendo a algún truco para abaratar.
Teniendo en cuenta que lo habitual es tener unos 117 invitados, celebrar un evento nupcial supone un buen desembolso, que varía dependiendo de donde te cases.
Festejar un matrimonio en Navarra cuesta bastante más que en Andalucía, por ejemplo. En la comunidad foral es donde más se paga, sale un coste medio por invitado de 229,10 euros. Por contra los andaluces que se casen en su tierra tienen la opción más económica, con 108,10 euros. Por eso las parejas que no quieren renunciar a su tierra sin dejarse los ahorros están empezando a buscarse sus trucos.
«Nosotros hemos cambiado de día por tema económico, realmente sale a cuenta», comenta Fernanda en un chat de bodas. Y Marta le da la razón: «En nuestro caso hemos optado por celebrarlo en viernes, la diferencia por cambiar de día ha sido de 3.000 euros».
Muchos de los profesionales que se dedican a las bodas suelen ofrecer descuentos en los periodos menos habituales, para ampliar la temporada y cubrir todos los fines de semana del año, además de ofrecer alternativas a las parejas que deciden pasar por el altar.
Un descuento que confirma Mónica Beltrán, de Las bodas de Mónica: «Algunas salas y masías si haces el evento con ellos en viernes si que te hacen un descuento. Son días que tienen menos demandas y por eso pueden ofrecerlas algo más baratas», aclara.
Más barato, pero no convence
Aunque las ventajas económicas son evidentes, aún son pocas las parejas que dan el paso de elegir un día entre semana: el 76% de las parejas que se casa este mes de junio lo hace en sábado y el 6% restante entre semana (de lunes a jueves).
Pero el número va aumentando: El 18% del total de bodas del mes de junio se celebrarán en viernes o domingo.
«En mi caso ha sido un 25% menos en los menús del banquete y un 20% en el fotógrafo. Esto fue decisivo para elegir casarnos en viernes», explica una de las usuaria del chat de bodas que sí se ha convencido. «A nosotros nos hacen descuentos por todas partes. Fotógrafo, dj, alquiler del espacio del evento, el catering», comenta también un futuro novio.
Un ahorro de una importante cantidad que no solo está motivando el cambio de fecha a viernes, también de temporada
«A mi si me sale bastante mejor. Si llego a coger la fecha que había pensado tendría que pagar más»,comenta Ángela.
La fecha preferida es septiembre
La época preferida para la celebración de la boda «es aquella en la que el tiempo es más favorable«, explican en el Libro imprescindible de las bodas , y por eso aunque la temporada empieza en mayo y acaba en octubre el mes preferido es septiembre con una media de 23.286 bodas.
Este año el día con más bodas previstas es el 9 de septiembre, seguido del 24 del mismo mes y el 24 de junio.
«Algunos proveedores pueden ofrecer ventajas o promociones si lo haces con ellos fuera de temporada», aclaran desde Bodas.net para justificar los descuentos que algunos usuarios detallan. Porqué elegir un mes como enero puede suponer también una ventaja, con una media de solo 5.333 bodas, es el mes con menos demanda y por tanto el más barato para casarse.
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