«Trump no es un fenómeno único en el mundo»

El exministro de Asuntos Exteriores y embajador en Washington entre 2004 y 2008, Carlos Westendorp, asegura en declaraciones a EL ESPAÑOL haber vivido con «el corazón en un puño» el asalto al Capitolio instigado por Donald Trump.

El veterano diplomático, que justo este siete de enero celebra su 84 cumpleaños, afirma que al final, una vez que se llevó a cabo la sesión del Congreso estadounidense para ratificar a Joe Biden como presidente, «la democracia ha triunfado». No obstante, advierte del peligro de un nacionalpopulismo que «se extiende» por el mundo. «Trump no es un fenómeno único» concluye. 

«Un movimiento que se basa en mentiras difundidas a través de las redes es algo nuevo pero que está aquí, no solamente en EEUU. Brasil con Bolsonaro, Johnson [Boris] no es una excepción, en España tenemos a Vox, en Hungría a Orbán…» enumera. 

Westendorp, el último responsable de Exteriores de los gobiernos de Felipe González, con el que fue también secretario de Estado para la Unión Europea (UE), especula con el origen y las motivaciones de quienes interrumpieron la sesión plenaria. Unos disturbios que han terminado con cuatro muertos y hasta catorce policías heridos. «La gente piensa que, desgraciadamente, estos grupos son auténticos. Es decir: que nadie les ha pagado. No creo que hayan sido financiados por el magnate Trump, pero todo es posible» asevera en conversación con este periódico.

En cualquier caso, el ex emabajador en EEUU, puesto en el que sucedió a Javier Rupérez -quien también contemplaba con «horror» lo sucedido en Washington- estima que entre los seguidores de Trump hay «gente que tiene miedo, y que son muy fáciles de convencer con argumentos falsos». Igualmente, señala el «supremacismo blanco» como una de las razones que impulsa al nacionalpopulismo al otro lado del Atlántico. 

«Es un problema latente, está ahí» afirma en referencia a las que denomina como las dos grandes «mayorías minoritarias», las de los afroamericanos y los hispanos. Dos sectores de la población, subraya, sin los cuales no se puede gobernar los EEUU.  

«Tiro por la culata»

En el origen de lo ocurrido este miércoles, Westendorp apunta al interés de Trump de presionar para que los republicanos ganasen los dos senadores que se elegían ese día por el Estado de Georgia, que finalmente fueron para los demócratas, que tendrán mayoría de control en el Capitolio.

«Le ha salido el tiro por la culata» concluye con una expresión coloquial. A su juicio, Trump se ha dedicado a «enardecer a las masas», como en su discurso en el que instaba explícitamente al asalto del Capitolio, Posteriormente, el propio presidente matizaba levemente sus palabras en un mensaje difundido en vídeo, en el que según el exministro español, trababa de «librarse de cualquier acción» penal en su contra. 

Westendorp, que convivió como embajador con el segundo mandato de George W. Bush, asegura que el último presidente republicano antes de Trump es «una hermana de la caridad» al lado del actual inquilino de la Casa Blanca. «Él ha sido presidente, eso no se olvida. Se ha portado como tenía que portarse» afirmaba sobre el antiguo mandatario, quien condenaba firmemente el asalto en un comunicado.

El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, al que representó Westendorp durante cuatro años, tuvo serios conflictos con el de Bush. Fundamentalmente a raiz de la retirada de las tropas españolas de Irak, ordenada por el presidente español nada más llegar a La Moncloa. 

Mirando al futuro, Westendorp considera que el gran reto de la presidencia de Biden que comienza el próximo día veinte, cuando pronunciará su discurso inaugural, es «gobernar para los que han votado a Trump». Y sobre el Partido Republicano, vislumbra al senador por Texas, Ted Cruz, como uno de los que podría encabezar la formación. Algo que no sería bueno para la «catársis» que, a su juicio, necesita la formación conservadora americana.