Paseo del Prado y Retiro, candidatas a Patrimonio de la Unesco

‘Paisaje de la Luz’ aspira a convertirse en el primer espacio de Madrid en ser Patrimonio Mundial de la Unesco

Por primera vez, Madrid opta a entrar en la lista de Patrimonio Mundial de la Unesco. Desde enero de 2019, la candidatura del paseo del Prado y Buen Retiro, ‘Paisaje de la Luz’, fue elegida como opción española para acceder a la categoría de Paisaje Cultural de la Unesco. El alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, ha dado un paso más y la ha presentado al embajador de España ante la Unesco, Juan Andrés Perelló.

«El informe emitido por la Unesco concluye que en el paseo del Prado se dan los valores necesarios para poder ser declarado Patrimonio Mundial, que son excepcionalidad y singularidad”, explicó Almeida. «Este paisaje resume lo mejor de nuestra historia y todo sobre lo que queremos proyectar el futuro de Madrid y los madrileños», añadió.

Valor universal excepcional del Paseo del Prado y Retiro

La candidatura a Patrimonio Mundial de la UNESCO del paseo del Prado y Buen Retiro, Paisaje de las Artes y las Ciencias en la categoría de Paisaje Cultural, está promovida por el Consistorio y la Comunidad de Madrid. Además, cuenta con el respaldo del Ministerio de Cultura y Deporte.

Se presentó oficialmente por España en 2019, bajo mandato de Manuela Carmena. Antes había sido aprobada por el Consejo Nacional de Patrimonio -integrado por las 17 comunidad autónomas españolas y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla- . En aquel momento, se puso en marcha una web para conocerla mejor y para que los madrileños compartieran sus fotos.

La capital ya había intentado formar parte de la Unesco en otras ocasiones, pero con esta candidatura del Paseo del Prado y el Retiro se consiguió.

 

Paseo del Prado y Retiro, ‘Paisaje de la luz’, candidata nacional para la Unesco

El bien que aspira a ser declarado Patrimonio de la Humanidad en la categoría de Paisaje Cultural, ‘Paisaje de la luz’, incluye el Paseo del Prado entre Cibeles y la Plaza de Atocha, todo el parque de El Retiro, y el barrio de los Jerónimos. Ubicado en el corazón de la ciudad, cuenta con una superficie de 190 hectáreas, de las que el 75% son espacios verdes.

Puede clasificarse como un paisaje cultural que ha ido evolucionando a lo largo de los siglos. Nació con la voluntad de dotar a la ciudad de un lugar en el que se pudiera disfrutar de la naturaleza sin salir de ella. Posteriormente se añade otro objetivo, propio de la Ilustración: el de difundir las Artes y las Ciencias para la educación e instrucción de la población, sin distinción de clases.

El Paseo del Prado es el primero de los paseos arbolados urbanos europeos. Los ciudadanos lo usaron desde el siglo XV como lugar de esparcimiento. Felipe II se encargó de acondicionarlo y embellecerlo con árboles y fuentes. Bajo el reinado de Carlos III, tuvo lugar la más importante intervención urbanística en este enclave. Así se convirtió en modelo para muchas ciudades españolas y latinoamericanas.

Grandes edificios en la zona del Paseo del Prado y El Retiro

La ciencia se introdujo en este paisaje urbano a través de la creación del Gabinete y Academia de Ciencias Naturales –hoy Museo del Prado– y el Real Jardín Botánico. Desde allí partieron expediciones botánicas para explorar el otro lado del Atlántico. También se instaló el Real Observatorio Astronómico, situado en la llamada Colina de las Ciencias.

Así, la candidatura madrileña basa el ‘valor universal excepcional’ que requiere la UNESCO en la unión de cultura, ciencias y naturaleza que aquí se da.

Además, en esta zona se concentran numerosas instituciones: el Palacio de Cibeles, actual sede del Ayuntamiento de Madrid, el Banco de España, la Casa de América, el Ministerio de Agricultura o el Museo Thyssen-Bornemisza. Y el entorno acoge grandes monumentos como la Puerta de Alcalá, las fuentes de Cibeles, Apolo y Neptuno, o el monumento a Alfonso XII en el estanque del Retiro.