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Melissa Leong es una viajera frecuente que se dedica a crear contenido en redes sociales precisamente acerca de este tema. De manera constante brinda a sus seguidores algunos tips para mejorar su experiencia a bordo. En esta ocasión los consejos estuvieron relacionados con la comida, dado que las muchas horas transcurridas en el aire le permitieron identificar cuáles son los mejores platos. Además, dio otros trucos para lograr que a uno le sirvan más rápido la comida dentro de la aeronave.
La influencer no solo es experta en viajes, sino que también es editora de libros de cocina. Así que el aspecto culinario es de sus más grandes especialidades. En ese sentido, en su columna para el portal Escape afirmó que la comida eurocéntrica es la mejor para comer en un viaje largo.
Incluso listó dos de sus alimentos favoritos: “El curry de Thai Airways, por ejemplo, es bastante bueno. Las cajas de bentō de Japan Airlines son lindas y fantásticas para las personas a las que les gusta elegir muchos bocadillos/okazu”, relató. Aunque también enunció otra opción para los pasajeros que no tienen la oportunidad de probar esta comida. A ellos los exhortó a pedir algo de la “cocina nativa de la aerolínea”.
Para Melissa, lo primordial antes de embarcar es investigar qué tipo de menús habrá a bordo. Aseveró que, por muy extraño que parezca, la mejor manera de asegurar el disfrute es saber qué se espera de una comida: “Tener una idea de lo que le pueden servir a uno ayuda a decidir si sería mejor llevar los propios refrigerios o simplemente sentarse y disfrutar del servicio a bordo”, consideró.
En ese sentido, si un pasajero ya sabe que el menú que ofrecerán las azafatas no es de su agrado, puede llevar sus propios alimentos: “Estoy aquí para decirte que a nadie le importa si traes tu propia comida”, comentó. Leong también instó a los viajeros a considerar esta alternativa sin el temor de ser juzgados y listó algunas sugerencias:
Finalmente, la experta dijo que hay un truco que los pasajeros pueden aplicar para que les sirvan su comida primero: pedir algo del menú dietético. “Hay una gran variedad de alternativas que puedes agregar a los refrigerios que llevas contigo. Por ejemplo, las opciones bajas en calorías o vegetarianas, para que puedas gastar tus calorías en comida realmente buena cuando quieras”, finalizó.
LA NACION
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