[ad_1]
Técnicos de la asociación científica ArqueoAntro han localizado los primeros restos humanos compatibles con alguna de las cuatro víctimas fusiladas por falangistas el 29 de marzo de 1939 y enterradas en una fosa del término municipal de Nules, en Castellón, a las que se busca en desde finales del pasado mes de agosto. “Por los traumatismos que presentan los restos, y por el cráneo hallado, donde se percibe lo que podría ser la marca de un tiro de gracia, creemos que puede tratarse de una de las víctimas”, explica el arqueólogo y miembro fundador de ArqueoAntro Miguel Mezquida.
Aquí, en esta fosa bajo un parcela agrícola de Nules, fueron fusilados cuatro jóvenes vecinos de Moncofa. Los jornaleros José Belloti Palmer -presidente de la CNT en el municipio-, Manuel Canós Arnau y Amadeo Martí Vila -estos dos últimos cuñados-; y Esteban Alavés Millán, comerciante de vino y aceite. Las tropas republicanas se rindieron dos días antes del fusilamiento, el 27 de marzo de 1939. El ejército franquista “empezó a cruzar las líneas defensivas y trasladar a los primeros prisioneros a los campos de concentración”, explica Mezquida. Al de Moncofa fueron deportados los cuatro jóvenes, de entre 20 y 30 años. Pasaron una noche allí. Fueron sacados de forma extrajudicial por un grupo de falangistas un día después de ser tomada Moncofa por las tropas franquistas. Los fusilaron y enterraron en la fosa ahora exhumada en la vecina localidad de Nules.
El hallazgo de los primeros restos humanos llega tras “tres semanas de intenso trabajo y mucha incertidumbre” en la parcela agrícola que linda entre las poblaciones de Nules y Moncofa donde se lleva a cabo la exhumación iniciada por el Grup per la Recerca de la Memòria Històrica (GRMH) de Castelló a instancia de familiares de las víctimas. “Se está haciendo con fondos propios de la entidad y con las aportaciones recibidas a través de una campaña de colaboración que hemos puesto en marcha; no tenemos financiación pública, porque la Diputación de Castelló -que gobierna el PP- no ha firmado el convenio suscrito con el anterior gobierno provincial” liderado por el PSPV con el apoyo de Compromís, denuncia Maribel Peris, presidenta del GRMH de Castelló. Mezquida corrobora la complejidad del proyecto ante la ausencia de fondos públicos: “Estamos trabajando bajo mínimos”. El País ha preguntado a la Diputación sobre lo ocurrido con la citada subvención pero la institución provincial todavía no ha emitido respuesta.
El siguiente paso ahora es delimitar la fosa y rastrear manualmente el terreno para tratar de localizar los restos de los otros tres represaliados.
“Es una búsqueda que parte de testimonios orales”, indica Maribel Peris. Los de las personas que vieron lo ocurrido y lo trasladaron a los familiares, “muy implicados emocionalmente, y que son quienes han pedido la exhumación”, señala. Familiares como Toni Macià Palmer, sobrino nieto de José Belloti Palmer, o Eloi Martí Alemany, familiar de Amadeo Martí Vila, que han estado “a pie de fosa desde el principio” y “se han pasado 40 años de democracia buscando testimonios, y eso nos ha permitido localizar la fosa, aunque finalmente estaba un poco más desplazada de lo que indicaban”, afirma Mezquida. Explica que otros testimonios apuntan a la posibilidad de que existan más fosas con fusilados trasladados desde los campos de concentración. “Tenemos que ver si estamos ante la fosa conocida como ‘la de los 4 de Moncofa’ o hay más”, detalla.
Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
En que los testimonios orales han sido la bomba de oxígeno necesaria para cercar la búsqueda coinciden Toni Palmer y Eloi Martí. Sobre dos testimonios, de la más de media docena que atesoraban, han podido acotar la búsqueda. “Uno de los testigos vio la tierra muy removida en esta zona, y estaba a 10 o 15 metros de lo que indicaba otro, y sobre ello hicimos”, añade Palmer.
Los dos han presenciado el anunciado del hallazgo de los primeros restos humanos de la fosa este miércoles. “Es un proceso tan largo que cuando estás a punto de perder la esperanza pero te viene la idea de que pueden estar… El momento ha sido de euforia y de descanso, porque era como tener una pesadilla permanente”, indica Toni Macià.
La búsqueda se ha centrado en un terreno de 10 hanegadas, “cinco se habían hecho ya con retro excavadora y no había salido nada, y en una esquina, ahí estaban. Casi se nos escapan”, explica.
Los cuatro jóvenes eran vecinos. Les unía, dice Toni Palmer, “su afiliación política de izquierdas, eran cenetistas”. Los mismos testimonios apuntan a que fueron torturados. “Esto se dijo mucho en el pueblo”, indican. “Ahora tenemos la esperanza de que aparezcan los otros tres”.
A juicio de Maribel Peris, lo ocurrido en esta última exhumación ejemplifica el temor de los grupos memorialistas ante el impacto negativo sobre las labores de recuperación de la memoria del ascenso de la derecha en las últimas elecciones municipales. Precisamente este martes el pleno de la Diputación de Castellón debatió una moción socialista sobre las exhumaciones y reparación de la dignidad de las víctimas de la guerra civil y el franquismo que se topó con el rechazo del PP, en el gobierno -14 diputados- y del único diputado provincial de Vox, Luciano Ferrer.
Desde el PP restaron mérito al trabajo del GRMH alegando que su labor se ha hecho conocida únicamente por “quitar cruces” -en alusión a la retirada de la cruz de los caídos del parque Ribalta- y nombres del callejero local a hijos predilectos de la ciudad. Desde Vox indicaron, sobre la financiación para exhumaciones, que no se niega a las familias enterrar a las víctimas “pero el dinero público deberá ser para todos y no solo para un bando”. Compromís ha indicado que impulsará iniciativas en los diferentes ayuntamientos para garantizar los trabajos de recuperación de memoria histórica en la provincia.
En los último ocho años, en la provincia de Castellón se han exhumado a iniciativa del GRMH o con su colaboración indirecta fosas comunes en 7 localidades: Castellón, Borriol, El Toro, Segorbe, Vilafranca, Castellfort y Vistabella. La más masiva ha sido la impulsada en el cementerio civil de la capital de la Plana, donde fueron enterrados más de medio millar de represaliados por el franquismo, y del que se han recuperado ya los restos de más de 300 personas. “Quedan por exhumar 228 cuerpos”, recuerdan desde el grupo memorialista. Tras la fosa de Nules-Moncofa queda pendiente otra para localizar restos de soldados republicanos en Les Coves de Vinromá.
[ad_2]
Source link