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EH Bildu advierte a PNV y PSE que no apoyará ninguna ley que responda a los «equilibrios internos partidistas» de los socios de gobierno
VITORIA, 19 Oct. (EUROPA PRESS) –
El Parlamento Vasco ha rechazado este jueves con el voto de los grupos en el Gobierno –PNV y PSE– y EH Bildu, las enmiendas a la totalidad presentadas por Elkarrekin Podemos-IU, PP, Vox y Cs a la Ley vasca de Educación que continúa de esta forma su tramitación en la Cámara vasca.
Los grupos de la oposición, excepto EH Bildu, han solicitado la devolución del proyecto de ley al Gobierno Vasco pero los grupos en el Gobierno –PNV y PSE– han rechazado estas enmiendas con el apoyo de EH Bildu, aunque la coalición ha advertido que no apoyará ninguna ley que responda a «equilibrios internos partidistas» de los socios de gobierno.
En el pleno, el consejero de Educación, Jokin Bildarratz ha presentado el proyecto de ley y ha defendido que este texto «es la traslación del acuerdo de abril de 2022, fecha en la que más del 90% del Parlamento Vasco aprobó las bases de la futura ley de educación».
Además, cree que el «mayor logro» de esta ley es que «es producto de un diálogo permanente con todos los agentes que actúan en el ámbito de la educación». «Es también la constatación de que más allá de la aritmética parlamentaria, los grupos parlamentarios apuestan por lograr el mayor apoyo parlamentario posible, porque nuestra sociedad se merece un amplio acuerdo en torno a la educación», ha subrayado.
Según ha explicado, con esta ley se quiere «impulsar un futuro sistema educativo vasco progresista y de calidad». «Queremos un marco reglado y renovado para abordar nuevos retos», ha indicado.
Tras recordar que la actual ley cumple 30 años, ha subrayado que la nueva ley «regula todo el sistema, subrayando el protagonismo de la escuela pública», y los centros concertados también se dotarán de fondos públicos, «en la medida en que cumplan con los compromisos y las obligaciones que establezca la ley».
LUCHA CONTRA LA SEGREGACIÓN
Por otro lado, ha señalado que el texto define la política de lucha contra la segregación. «La preferencia por la educación pública es innegable en esta ley, pero no podemos hacer frente a la segregación si no es con la participación y colaboración de todos los centros», ha señalado. En este sentido, ha indicado que «promueve el desarrollo de las políticas y estrategias que den respuesta a la diversidad del alumnado en el marco de un sistema educativo basado en los principios de inclusión y equidad».
Bildarratz ha recordado que la tramitación de la ley se encuentra en el momento de «contrastar y aprobar las enmiendas presentadas», tarea que les corresponde a los miembros del parlamento. «Estoy convencido de que los grupos harán un análisis en profundidad de las enmiendas presentadas y serán también capaces de aunar posturas y llegar a un acuerdo», ha resaltado antes de apostar por «aprobar una ley con el mayor consenso posible».
ENMIENDAS DE TOTALIDAD
La parlamentaria de Elkarrekin Podemos-IU Isabel González ha explicado que apoyaron el Pacto Educativo «por la inclusión de la apuesta por la escuela pública y la lucha contra la segregación» pero ha criticado las «verdaderas intenciones del Gobierno», ya que cree que esta ley es «un castillo en el aire en lo que respecta al fortalecimiento de la Escuela Pública y lucha contra la segregación». «Volvamos al acuerdo educativo y cumplámoslo», ha reclamado.
Para González, el proyecto del Gobierno «consolida un sistema educativo altamente privatizado y va a comprometer la cohesión social de Euskadi durante las próximas décadas». «Pedimos la devolución porque no defiende la Escuela Pública como se merece», ha insistido antes de subrayar que su grupo defiende la red pública con esta enmienda y en los próximos días, lo hará en la calle junto a agentes educativos.
El parlamentario del PP Carmelo Barrio ha criticado que este proyecto de ley «frustra la idea de mejora de la educación porque se dirige a un fin político distinto de la educación y de la enseñanza» y ha recordado al consejero que «el castellano y el euskera son las lenguas oficiales de la comunidad autónoma vasca, y ambas deben funcionar como ejes vertebradores del sistema plurilingüe, garantizando el derecho de todos los alumnos a recibir la enseñanza, tanto en euskera como en castellano, en los diversos niveles educativos».
Además, ha considerado «injustificada la desaparición de modelos lingüísticos educativos» y cree necesario establecer una financiación «adecuada y suficiente» para la educación concertada. «Es un proyecto de ley excluyente, un proyecto ley de nacionalistas y para nacionalistas, no es un acuerdo de país», ha insistido, antes de recordar que han presentado 56 enmiendas parciales para «poder frenar algunos de los profundos desequilibrios» de la norma.
La parlamentaria de Vox, Amaia Martínez, ha afirmado que esta «es la ley de PNV y EH Bildu» y ha criticado que el texto «supone una verdadera opa hostil al modelo de enseñanza concertada que se verá atrapada por los tentáculos ideológicos marcados por el Gobierno Vasco».
Además, ha señalado que, «de manera subliminal, tiende hacia la eliminación del sistema de modelos lingüísticos actual» y «toma el euskera como eje» de forma que «se pretende vulnerar el derecho a la libertad de elección lingüística de los padres a educar a sus hijos en su lengua materna».
El parlamentario de Cs Jose Manuel Gil ha criticado que en el Pacto educativo «sólo estaban unos cuantos partidos nacionalistas» y cree que este proyecto de ley «claramente debe retirarse» porque el texto legal «utiliza de forma descarada a la educación para ponerla al servicio de un proyecto político independentista» y «al servicio de la euskaldunización forzosa». «Por dignidad y por coherencia, dimita señor Bildarratz», ha vuelto a pedir.
VOTO EN CONTRA
El parlamentario de EH Bildu Ikoitz Arrese ha rechazado las enmiendas a la totalidad porque cree que «pretenden obviar el camino recorrido desde 2021» que posibilitó la firma del Acuerdo Educativo y «negar la posibilidad de aprobar una buena ley». «Queremos dar una nueva oportunidad al debate, a tener una buena ley y a la transformación de nuestro sistema educativo, pero que nadie se equivoque, no de cualquier modo», ha advertido.
En este sentido, ha subrayado que no van a apoyar ninguna ley que «no responda a los retos que tiene la educación vasca» y responda a los «equilibrios internos partidistas» del Gobierno PNV-PSE y ha acusado a los socialistas de «haber cambiado las reglas de juego». «Nos preocupa que el PSE quiera a EH Bildu fuera de la ley y que el PNV parezca dispuesto a darle eso que le pide», ha subrayado.
El parlamentario del PNV Gorka Álvarez ha apostado por alcanzar «un acuerdo amplio» que permita contar con el mejor texto y ha subrayado que la Ley busca ofrecer «la mejor educación, una de calidad, integradora, con igualdad de oportunidades, euskaldun y con una firme apuesta por la innovación». «Tendemos la mano a los grupos que conforman esta Cámara para seguir trabajando, realizando propuestas de mejora y tejiendo un futuro acuerdo que será esencial para el futuro del país», ha subrayado.
La parlamentaria del PSE Maria Jesús San José se ha mostrado
«muy satisfecha» con las enmiendas acordadas con PNV que «clarifican distintos aspectos» al garantizar, entre otros, «el carácter vehicular de las lenguas de aprendizaje» y «se concreta que el sistema plurilingüe en el que se estructura a la educación vasca, cuyo eje es el euskera, y se articula a través de dos lenguas oficiales y al menos una lengua extranjera». «Nosotros no vamos a apoyar ningún marco lingüístico que cree estigmatización y exclusión», ha defendido antes de subrayar que los modelos lingüísticos «están vigentes».
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