[ad_1]

«Es insoportable. Retumba el suelo y ya son muchos años que no se puede dormir aquí. Todos los días miro el despertador a ver si llegan las 6 de la mañana para poder dormir». La que habla es Amaya, vecina de Móstoles, pero podría ser la de cualquier persona que viva en el mismo bloque de la Avenida de Portugal y sufra en sus carnes el ruido de la discoteca que hay debajo de su casa.

La música a todo volumen que se cuela en el interior de las viviendas y las peleas que se suceden a la salida del local han llevado al límite a estos mostoleños, que desde 2014 denuncian su situación al no poder conciliar el sueño, hasta el punto de que algunos vecinos están intentando vender sus pisos y largarse a otra zona.

En una entrevista para Telemadrid, todos lamentan que ni el Ayuntamiento ni la policía han puesto remedio. «Hemos llamado muchas veces a la policía, vienen pero no hacen nada». «Es un bucle de sanciones y cierres del local, pero a los 6 meses aparecen otros que cogen el negocio, lo abren, cambian el nombre y la placa y siguen», cuentan.

Indignados, todas las tardes organizan caceroladas en modo de protesta, que siempre terminan con una canción entonada «a viva voz» por una de las vecinas. Una forma, dice Amaya, portavoz del bloque vecinal, de concienciar sobre su sufrimiento. «Se me ocurrió hacer esto para visibilizar algo que lleva muchos años oculto aquí y que es de dantesco».

«¡Basta ya, basta ya! Su ruido no se puede aguantar. El ruido no se puede tolerar y no nos callarán», entona ante la cámara de la televisión a modo de ejemplo.

La situación es tan crítica que los habitantes del municipio decidieron crear la cuenta @ContraRuidoMo en Twitter para publicar aquellos pubs y bares nocturnos donde hay altercados.

La solución, afirman, está en el cierre de estos locales a las 00 horas, pero tras ocho años luchando por



[ad_2]

Source link